Gat una vida de «Señor Gato» al que recordaremos con respeto y amor.

Hoy «Gat» descansara junto a su amiga «Manchita» en el Bosque.

23 años para un gato es mucho, pero aun así ayer después de un montón de maullidos en todos los tonos posibles has tenido de tiempo de pedirme de nuevo comida extra que le ayudaba a mejorar su condición de vegete y no poder cazar. Esta noche sido una noche pesada, en la que me ha despertado varias veces y le he tenido acariciar por su insistencia por el dolor que sufre lo único que le calmaba era saber que estaba junto a el, pero claro, no hablamos el mismo idioma, no le fue fácil, un año después de verlo degradarse, he tenido que ayudarle a marcharse y es algo que yo no deseo pero es mi responsabilidad. Ver su dolor es mas fuerte que su perdida.

No nació aquí llego para paliar la soledad de Elfo una hembra de gato de sobresaliente inteligencia. La Mateba siempre fue su espacio, le daba igual que fueran gasto silvestres, castrados o hijos asilvestrados, siempre fue un defensor feroz de su casa y de su entorno, tenia barias estrategias, la intimidación directa. una carga potente y letal y su largo alcance con el pipi podía ser de un par de metros y muy buena puntería, así que mas de uno fuera lo que fuera, se fue con su terrible recuerdo.

Durante su vida, rara ha sido la vez que un escorpión o una escolopendra, ratón o lo que fuese se colara en la casa. así que puedo decir que no solo nos guardo las espaldas si no que cuido de todos a su manera. Acostumbrados ver el trato que daban los gatos de ciudad comiéndose a sus hijos por necesidad y mal trato, el todo lo contrario ya Fuera Elfo o Blau cuido de su prole mientras estuvo vivo incluso consentía a Odin que los «limpiara»

Un auténtico profesional de los maullidos modulados, conseguía hacerse tanto con niños como con padres excesivamente cautos. Les sacaba de todo ya sean caricias o comida, sobre todo ( Todo un profesional)

«Mama Blau» (Roja) «Colores» (De muchos colores) y «Blanquita» (Evidentemente)

De alguna manera siempre te hacía sentir su presencia, bien desde el tejado o bien acompañándote en los paseos diarios, una costumbre que inculco a las hembras de su descendencia incluso a las jefas como Elfo y su ultima compañera «Blau» Hoy viven en la casa, su legado vivo de un gato a todas luces diferente.

Gat Cuidaba de su descendencia como nunca había visto en un gato supuestamente callejero. Le recordare siempre atendiendo la prole en el sofá de casa que hay junto a la chimenea y que tanto le gustaba compartir con “Elfo” su compañera que hace tiempo falleció. Él era una especie de híbrido entre una Gata de Angora y un Gato montés, muy corpulento y ágil, cosa que le ha ayudado a ser el jefe hasta el final de sus días. Pero recuerdo que de nada le sirvió ante “Elfo” cuando se conocieron, pues esta le daba unos buenos y sonoros zarpazos cuando trataba de acercarse y que solo ceso cuando ella entro en celo y la naturaleza hizo el resto.

Todos los echaremos de menos aquí en casa y tampoco queremos